lunes, 17 de mayo de 2010

LINEA DE MÁXIMA PENDIENTE

A falta de menos de una semana, he empezado con los entrenamientos específicos de montaña para preparar la marcha montañera que realizaré este próximo sábado en las inmediaciones de Cabezón de la Sal. Sus casi 46 km y el buen tiempo anunciado no deben de ser obstáculo para pasar un día lo más apacible posible en plena naturaleza.

Eso sería el ideal, zapatillas y camino arriba, piano - piano, sin preocuparse por cuanto tiempo lleva consigo el alcanzar la siguiente cota; pero como me conozco seguro que empiezo a darle zapatilla desde el principio, hasta que las piernas aguanten, sin preocuparnos ni por donde vamos, ni lo que nos queda.

Así que para adecuarnos un poco más a los cambios de desnivel esta tarde me he calzado las zapatillas y me he ido a dar un paseo hasta el monte Urko, pero no por su camino más tradicional, sino que me he ido a subir vía Rekalde - Cantera y a partir de ahí he seguido por un camino super ancho, lleno de barro y cuando he encontrado el primer camino que salia hacía arriba, por ahí me he metido, como las cabras, por donde más pendiente había, gracias que he llevado el bastón que sino me cuesta el doble subir; después de haber dado una decena de pasos, el camino se ha vuelto más indiscreto y he acabado entre algunas zarzas, iendo a parar gracias a Dios a otro camino - semi barrizal, que me ha llevado sin mucha más dificultad hasta el cresterio que da a lo más alto del monte Urko.

Como siempre se ha dicho, para ir hacía arriba, lo mejor es subir por la LINEA DE MÁXIMA PENDIENTE. Ya me va quedando menos para la gran cita del sábado, 46 km por la montaña !!, que el tiempo nos acompañe y que no nos abandonen las fuerzas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario